
Estas directrices se insertan en el contexto de las preocupaciones geopolíticas y de seguridad relacionadas con la invasión de Ucrania por parte de Rusia. La reciente escalada de la guerra por parte de Rusia, incluso a través de la movilización militar y los ‘referéndums’ falsos, provocó un aumento de ciudadanos, incluidos los reclutas y sus familias, que huían de la Federación Rusa. Las directrices exigen un escrutinio de seguridad reforzado al emitir visas a los rusos y controles fronterizos más estrictos, respetando plenamente la ley de asilo de la UE.
Antecedentes
El 6 de septiembre, la Comisión propuso la suspensión total del Acuerdo de Facilitación de Visados con la Federación de Rusia, a raíz de los mayores riesgos de seguridad a los que se enfrenta la UE. El Consejo votó formalmente la propuesta el 9 de septiembre y, ese mismo día, la Comisión publicó directrices para los Estados miembros para ayudar a sus consulados a gestionar las solicitudes de visado para estancias de corta duración presentadas por ciudadanos rusos.
Durante la mesa redonda de alto nivel sobre la respuesta política integrada a las crisis (IPCR) del 26 de septiembre, los Estados miembros solicitaron a la Comisión que los apoyara más y actualizara las directrices sobre visados, emitidas el 9 de septiembre, y que proporcionara directrices sobre los controles fronterizos.
Objetivos
Estas directrices
- se publican para aplicar un enfoque común de la UE, ya que varios Estados miembros se enfrentan a una mayor presión en sus fronteras con la Federación de Rusia, pero también a un número cada vez mayor de solicitudes de visado y consultas de ciudadanos rusos.
- piden a los consulados y autoridades fronterizas de los Estados miembros que apliquen un mayor grado de controles de seguridad y un enfoque coordinado al realizar evaluaciones individuales de las solicitudes de visado de ciudadanos rusos y controles en las fronteras exteriores de la Unión.
Control de seguridad reforzado sobre la expedición de visados a los rusos
Los Estados miembros deben evaluar las condiciones en las que se pueden expedir visados Schengen a los ciudadanos rusos de forma restrictiva y coordinada. Los Estados miembros deben aplicar un enfoque estricto al evaluar la justificación del viaje. Esto incluye a los ciudadanos rusos que huyen de la movilización militar.
Si un solicitante de visado (por ejemplo, una persona que huye de una movilización militar) planea una estadía prolongada en la UE, los consulados de los Estados miembros deben tratar el caso según las normas nacionales aplicables para visados de estadía prolongada. Cuando se trata de visas para estadías cortas, los consulados están llamados a aplicar cualquier excepción humanitaria de manera restrictiva. Corresponde a los Estados miembros, sobre la base de un examen individual , evaluar si las solicitudes de ciudadanos rusos pueden entrar en la categoría de razones humanitarias.
Los consulados de los Estados miembros también deberían examinar detenidamente los casos de rusos que soliciten un visado para estancias de corta duración desde fuera de Rusia. Dichos casos deben dirigirse al consulado responsable de su lugar de residencia, normalmente en la Federación Rusa.
Revocación y anulación de visas válidas (en la frontera)
Los Estados miembros también deben instruir a sus consulados y guardias fronterizos para que ejerzan un mayor escrutinio y adopten un enfoque estricto con respecto a la reevaluación de los visados ya emitidos a cualquier ciudadano de la Federación de Rusia, sobre la base de un nuevo examen de la situación individual en el contexto geopolítico actual. De conformidad con el artículo 30 del Código de visados, la mera posesión de un visado no confiere un derecho automático de entrada en el espacio Schengen. En caso de que existan motivos para la anulación/revocación, dicha decisión puede ser tomada por la guardia de fronteras independientemente del Estado miembro que expida el visado.
Controles coordinados y exhaustivos de los ciudadanos rusos en las fronteras exteriores de la UE
La seguridad de las fronteras exteriores es un requisito previo para el funcionamiento del espacio Schengen sin controles en las fronteras interiores. La guía destaca aspectos del Código de fronteras Schengen y pide a los Estados miembros que refuercen los controles de seguridad en las fronteras exteriores y sigan un enfoque coordinado en las fronteras de la UE con la Federación de Rusia para evitar que un ciudadano ruso al que se le haya denegado la entrada en una frontera ser admitido por otro.
Las directrices se entienden sin perjuicio del marco jurídico aplicable en el ámbito del asilo, incluido el principio de no devolución.
Evaluación más cuidadosa de los documentos de viaje por parte de los transportistas de pasajeros
La guía también recuerda que los transportistas son responsables de los nacionales de terceros países que han llevado a la UE pero a quienes se les niega la entrada. Los transportistas deben permanecer atentos al verificar los documentos de viaje requeridos para ingresar, especialmente para los ciudadanos rusos. También son responsables de devolver a la persona a la que se ha denegado la entrada en la UE a su país de partida.
Actuaciones futuras
La Comisión mantendrá la implementación de estas directrices bajo revisión constante, para apoyar acciones rápidas y coordinadas a nivel de la UE para abordar todos los desafíos emergentes. La Comisión informará con este fin en el marco del IPCR y recopilará la información necesaria a través de la red Blueprint.