El Consejo ha adoptado el 26 de febrero de 2024 nuevas normas para mejorar el funcionamiento de los mercados europeos de capitales y reforzar la protección de los inversores en la UE. La Directiva adoptada modifica la Directiva sobre los gestores de fondos de inversión alternativos, por la que se regulan los gestores de fondos de inversión libre, fondos de capital de inversión, fondos de inversión de créditos privados, fondos inmobiliarios y otros fondos de inversión alternativos en la UE.

También moderniza las normas del marco aplicable a los organismos de inversión colectiva en valores mobiliarios, es decir, los fondos de inversión minorista convencionales armonizados a escala de la UE, como los fondos de inversión colectiva y las sociedades de inversión.

Antecedentes

La Unión de los mercados de capitales es la iniciativa de la UE conducente a crear un auténtico mercado único para los capitales en toda la UE. Su propósito es que la inversión y el ahorro circulen por todos los Estados miembros en beneficio de los ciudadanos, las empresas y los inversores.

Las modificaciones de la Directiva sobre los gestores de fondos de inversión alternativos (GFIA) y la normativa sobre los fondos de inversión convencionales de la UE (OICVM, u organismos de inversión colectiva en valores mobiliarios) forman parte del conjunto de medidas relativas a la unión de los mercados de capitales (UMC), que la Comisión presentó el 25 de noviembre de 2021.

Potenciación de la integración de los mercados de gestión de activos

Las nuevas normas

• potencian la integración de los mercados de gestión de activos en Europa y modernizan el marco que rige los principales aspectos normativos;
• mejoran la disponibilidad de instrumentos de gestión de la liquidez, con nuevos requisitos para que los gestores puedan movilizar dichos instrumentos.

Se garantizará con ello que los gestores de fondos estén bien equipados para hacer frente a salidas de depósitos significativas en tiempos de turbulencias financieras.

La Directiva modificativa establece además un marco de la UE para los fondos que originan préstamos —es decir, los fondos que ofrecen créditos a las empresas—, que se complementa con varios requisitos destinados a reducir los riesgos para la estabilidad financiera y a garantizar un nivel de protección adecuado de los inversores.

La Directiva introduce normas reforzadas para la delegación en terceros por parte de los gestores. Esto les permitirá un aprovechamiento más adecuado de los mejores recursos de los especialistas del mercado, con sujeción a una supervisión reforzada y a la preservación de la integridad del mercado.

Otros componentes clave de las nuevas normas son la mejora del intercambio de datos y la cooperación entre las autoridades, así como nuevas medidas para identificar los costes indebidos que podrían cargarse a los fondos ―y, por ende, a sus inversores― y para evitar posibles denominaciones engañosas a fin de proteger mejor a los inversores.

Actuaciones futuras

La Directiva se publicará en el Diario Oficial de la UE y entrará en vigor veinte días después. Los Estados miembros dispondrán de 24 meses a partir de la entrada en vigor para transponer la normativa a la legislación nacional.